Llega un proyecto muy motivador: Hard Rock Café de Tenerife nos ha encargado dos guitarras de hierro de 5 metros de altura, que irán en la parte exterior del restaurante, sobre unas fuentes de agua.

Las condiciones de alta salinidad, el constante contacto con el agua clorada, los fuertes vientos de la zona y el transporte marítimo hasta Tenerife son una dificultad añadida.

El diseño va evolucionando semana tras semana, añadiendo y quitando detalles, según los consejos de los arquitectos de TWO-BO, que llevan todo el proyecto.

Las piezas cortadas por láser van llegando al taller, donde dos soldadores expertos las hacen encajar a la perfección; el cuerpo, el mástil, el relieve de las letras que se sobreponen para darle el volumen deseado; todo toma forma en poco más de dos semanas de trabajo.

Una vez todo ha encajado, se desmonta y se galvaniza en caliente, tratamiento que evitará la oxidación de las piezas.

Como acabado superficial, una mano de imprimación de epoxi y una de pintura especial que imita la chapa corten dejan la superficie perfecta y el aspecto inmejorable.

El montaje en Tenerife se realiza en menos de un día. Todo encaja con facilidad, y una grúa de grandes dimensiones se encarga de ponerlas en su sitio, donde se anclan a una bigas de hierro que previamente se habían fijado a la estructura del edificio.

Para completar el proyecto Hard Rock, nos encargan unas picas a medida, que se colocarán sobre unas macetas transparentes iluminadas. Como podéis ver en las fotografías, el resultado otra idea de los arquitectos de TWO-BO es brillante, y hemos conseguido convertirla en realidad.

Todo listo para la inauguración el 28 de marzo. ¡Qué no pare la música!

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